Sp. Cabanillas 2-0 Depor guada. Sin recursos.

Pues si, otra nueva derrota, y esta vez ante un rival de nuestro nivel. Alejados ya los dos primeros, parecía que el tercer puesto lo conseguiríamos con relativa comodidad, Cabanillas era hoy nuestro rival, aquel equipo con el que empatamos a 2 en la 1ª vuelta, pero que al que superamos en juego y solo la "mala suerte" nos privó de una victoria.
Pero hoy no. Y comenzamos bien, enchufados, presionando arriba, recuperando rápido y moviendo el esférico, unas buenas sensaciones que no se convertían en ocasiones al llegar al área rival. donde se necesita la precisión , serenidad y decisión de disparar...ahí se nos fundían los plomos.
El equipo local, no generaba juego, ni inquietud, no se acercaba por los dominios morados. Daba la sensación de un partido plácido, donde en cualquier momento llagaría en gol deportivista, pero no, fue al contrario...voleón cabanillero al cielo de la campiña, que bajó a nuestra área falta de entendimiento o salida tardía, y de la nada el 0-1. A remar, pero seguíamos controlando el juego aunque cedimos metro por el shock, y en un corner un delantero local empuja a su marcador y franco remata al segundo palo 2-0 (el arbi reconoció en el descanso haberlo visto...pero "no era para tanto",-hombre, fue gol y posterior victória...en fin.). Poco más tarde, balón largo, el portero campiñero sale "a por uvas" Jose cede a Gau y marca para meternos en el partido, pero el colegiado lo anula por fuera de juego, cuando no había portero, pero sí varios defensas que habilitaban a nuestro jugador...nada, 2-0 y a la caseta a descansar.
Toda la segunda parte para remontar, había tiempo y calidad, paro ¿creíamos en la remontada?...
El partido se volvió insulso, un frontón cabanillero donde nos estrellábamos una y otra vez. Siempre fallaba algún matiz, el control, el último pase, una pierna rival. No conseguíamos tener claridad, hasta que salió el sol en forma de penalty, que fallamos y tampoco sirvió para darnos "chance". No se vió espíritu de remontada, ni en el verde, ni en el banquillo, con cambios a 10 minutos del final y con defensas de mediocentros, para distribuír y controlar el juego. De ahí al final, un triste"quiero y no puedo" y la sensación de que pudimos hacer muchísimo más.
La conclusión es de "perrogrullo": si no metes gol, ni de penalty y los recibes en cada acercamiento, se hace muy difícil ganar, solo lo harás ante rivales sencillos o cambiando esta dinámica. Y por supuesto, el árbitro no acertó en decisiones importantes, pero el partido no lo decidió él, hay que ser autocríticos y se ve poca evolución en una temporada que se acerca al final.
La realidad es que da lo mismo quedar 3ª ,4ª o 6º, pero el honor deportivo debe hacer que peleémos hasta el final.
"A mal tiempo, buena cara", a seguir compitiendo y hacer equipo. Vamos Dépor.